Iniciamos con este artículo una serie de TIPS MONSHOT en clave estratégica para dar ideas y recomendaciones de soluciones eficientes para la mejora de procesos ya establecidos en nuestra organización.
La metodología OKR es conocida porque es la estrategia de planificación aplicada por grandes compañías como Google, Spotify, Twitter, Uber y el mismo Linkedin, aunque la empresa pionera fue INTEL. No por ello tiene que contemplarse como exclusiva de grandes empresas y, además, tecnológicas, todo lo contrario. Su definición es simple y sencilla: OKR significa (O) Objetivos y (KR) Resultados Clave. La tarea de su aplicación consiste en adaptar las herramientas a cualquier tipo y medida de organización que opere en cualquier sector. Si la implantación es consciente y con determinación, las ventajas son inmejorables. Aquí presentamos 5 de ellas que creemos fundamentales:
- Transparencia e implicación del equipo.
La definición de los OKRs no es una tarea que se realice solamente con la dirección de la organización. Todo el equipo de trabajo debe implicarse en el proceso de diseño de los objetivos, resultados clave y acciones a llevar a cabo. Esta implicación del equipo favorecerá la motivación y el compromiso con el grupo y sobretodo la transparencia en la gestión. Las órdenes no llegan desde arriba si no que es decidida y compartida por todos.
- Alineación, focalización del equipo
Cuando todo el equipo está informado y colabora en el diseño de los objetivos de la empresa, da lugar al hecho de que todos los que componen el equipo están concentrados y alienados hacia el mismo objetivo. Larry Page, de Google, dijo: ‘I’d rather have the objective be to go to Mars, and if we fall short, we’ll get to the moon. This is how you make moonshots.’, lo cuál traducido sería 'Prefiero tener como objetivo llegar a Marte porque si me quedo corto, llegaré a la luna, y así es como generas metas motivadoras'.
- Trabajo y aprendizaje constante
Los Objetivos se pueden fijar a nivel anual, los resultados Clave trimestralmente y las acciones se pueden revisar cada quince días, sin embargo, estos plazos siempre pueden variar dependiendo de las características de la organización. Esta temporización nos conduce a revisiones y análisis constantes en la empresa y permite generar aprendizaje, ya que las decisiones tomadas no son fijas, sino flexibles y pueden variar dependiendo de los cambios en el entorno o cambios estratégicos. El aprendizaje y la flexibilidad son fundamentales para avanzar hacia el objetivo de la mejora estratégica.
- Trazabilidad y seguimiento
Aplicando esta metodología se define todo el proceso productivo y/o generación de servicios en términos de objetivos, variables clave y acciones. Todas las variables son visibles desde el inicio de la producción del producto y/o servicio ya que está implicado todo el equipo. Se puede realizar seguimiento en cualquier momento, ya que las métricas y mediciones se revisan constantemente.
- Resultados
Las ventajas descritas en los 4 puntos anteriores, nos conducen a pensar que todo el equipo está motivado y trabajando con el mismo propósito y en dirección al mismo Moonshoot. La implantación del marco de OKRs consigue que se establezcan metas a largo plazo acompañado de un trabajo constante y eficiente en el día a día, a corto plazo, de cada miembro del equipo. La alineación y motivación del equipo se traduce en resultados de eficiencia y calidad.
Presentamos un ejemplo gráfico de la aplicación de OKRs en una pequeña empresa de servicios paralelos en el sector de la construcción, como podría ser una ferretería.
La implementación de metodologías de trabajo como las de OKR permiten plasmar negro sobre blanco las preocupaciones del equipo de trabajo. De esta manera pueden ser intuidos, localizados y finalmente determinados los objetivos reales de la empresa. Para empezar a 'poner orden' no es preciso afrontarlos todos de una vez con muchas acciones a realizar. A partir de 2 es suficiente, establecido a través de conversaciones con el equipo:
Con la definición de estos objetivos, variables clave y acciones, todos los miembros del equipo, independientemente de las tareas de las que sean responsables, conocen la dirección a la que la empresa quiere ir y así todos trabajan para lograr el mismo objetivo.